Oración para entrar al Otoño

Gran Espíritu, Madre Tierra,
Poderes de las Cuatro Direcciones,
Mis aliadas y aliados, animales de medicina,
Ancestras y ancestros
Y todos quienes me aman,
Estén conmigo ahora y escuchen mi oración.

Más allá de los paisajes de la vida ordinaria
Yacen las dimensiones de la conciencia superior
Y la realidad perenne.
En algún lugar de tu dimensión, oh, Gran Espíritu,
La Gran Madre abre sus brazos
Y recibe nuestros escudos del espíritu,
Que giran por toda la eternidad.
Esta vida terrenal es un regalo de ti, Gran Madre
Yo honro tu presencia en mi vida, Gran Espíritu,
Y tu regalo de vida eterna.
Yo sé que mi escudo del espíritu necesita equilibrio,
Que en esta encarnación tengo la oportunidad
De rasgar los velos de la ignorancia
Y caminar sobre la tierra en mi sagrada forma
Igualmente equilibrada en las energías
Dentro de mí misma y dentro del cosmos.

Voy a manifestar en esta encarnación mi verdadero destino
Encontrando las pasiones ocultas
Que viven dentro de mi alma y mi corazón,
Aquellas pasiones ocultas de la verdad,
De la armonía y la bondad y el equilibrio
Que viven dentro de mí.
No tendré temor de mirar
El lado oscuro de mi ser.
Ese lado oscuro que es mi naturaleza instintiva,
La cual he negado de algún modo en mi vida.
Reprimir quien verdaderamente soy es vivir en una mentira
Y vivir mi vida a través de los ojos de los demás,
No a través de mis propios ojos.
Te ruego, Gran Madre, que me ayudes a tomar responsabilidad
Por quien Yo Soy en esta vida,
Por mis debilidades y fortalezas,
Te ruego para que me ayudes a caminar el camino
De una guerrera espiritual del corazón.

Mientras veo los muchos espejos que he creado
Alrededor de mí, en mi vida,
No tendré miedo de mirarme en ellos.
Y voy a darme cuenta que no importa el reflejo que veo,
Es el reflejo de algún aspecto de ti, Gran Espíritu,
Y por eso amaré todo lo que vea.

Tomar mi poder en esta vida
Es entender que estoy hecha de poder
Y que el poder es un reflejo de ti, Gran Espíritu.
Entiendo que la primera lección de poder es
Que estamos solos en la batalla
Hacia la iluminación.
Y también entiendo que la última lección de poder es
Que todos somos en verdad UNO.
Tú eres mi luz y mi amor y mi camino,
Oh, Gran Espíritu,
Y te honro todos los días de mi vida.
HO!

Lynn Andrews